Las sanciones impuestas por la Unión Europea representan un grave problema para los pescadores rusos, puesto que, ellos siguen vendiendo sus productos a países integrantes de esta comunidad geopolítica. Decenas de barcos rusos han llevado pescado a Noruega en las últimas semanas.
Las sanciones no incluyen especies de pescados blanco, debido a que se limitan a crustáceos como el cangrejo y el camarón. Un último informe dejó claro que Rusia ha exportado una cantidad de pescado valorada en al menos 150 millones de euros, lo que representa un crecimiento de exportación de un 38% respecto al año anterior.
Fuente: DW