La controversia en torno al fatídico derrumbe de la discoteca Jet Set, donde perdió la vida el reconocido merenguero Rubby Pérez y otras 235 personas, sigue generando titulares. Esta vez, por un acuerdo que habría sido suscrito por su hija mayor, Zulinka Pérez, con los propietarios del establecimiento, Antonio y Maribel Espaillat según Listín Diario.
De acuerdo con un documento notariado con fecha del 28 de mayo, Zulinka habría recibido una suma económica por parte de la empresa Inversiones E & L, S.R.L., para cubrir gastos médicos, personales y cualquier daño que pudiera haber sufrido como consecuencia directa del desplome. La también exintegrante de la orquesta de su padre figuraba como empleada del lugar, lo que se menciona en el acta legal como parte de los argumentos del apoyo económico entregado.
Paralelamente, sus hermanas Casiey y Ana Beatriz Pérez, también hijas del intérprete, habrían interpuesto una querella formal contra los dueños de la discoteca. En su demanda, solicitaron una compensación que asciende a los 435 millones de pesos dominicanos, con la intención de destinar los fondos a programas formativos para jóvenes del país, en colaboración con entidades públicas y organizaciones de la sociedad civil.
Los hermanos Espaillat enfrentan actualmente cargos legales y medidas de coerción, entre ellas el pago de una garantía económica de RD$ 50 millones, impedimento de salida del país y presentación periódica ante las autoridades. El caso fue declarado complejo por las autoridades judiciales.
Fuente: 2001
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