Con un cacerolazo, los docentes de la escuela bolivariana Punto Fijo decidieron unirse a las protestas por el pago de salarios justos y la exigencia de garantías en sus derechos laborales. Siguiendo el ejemplo de otras instituciones, docentes, personal administrativo y obrero se concentraron frente a la escuela para protestar.
La protesta de docentes la respaldó un grupo de padres y representantes, quienes acompañan a los docentes en las diferentes manifestaciones en la ciudad. Además de apoyar en las protestas por los derechos laborales de los maestros, los padres y representantes decidieron no enviar a los estudiantes a clases.
Fuente: Nuevo Día