El Congreso de Panamá dejó en manos de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) la decisión sobre el contrato de operación de la mina de cobre a cielo abierto más grande de Centroamérica, cuya anulación exige la población panameña en masivas protestas desde hace dos semanas.
«Hemos tomado la decisión de (…) dejarle a la máxima institución jurídica de este país, la Corte Suprema de Justicia, la decisión final», dijo el diputado oficialista Leandro Ávila, ante el plenario de la Asamblea Nacional.
Fuente: AFP