América Latina y el Caribe, al igual que el resto de las regiones del mundo, presenta claros síntomas de desaceleración económica como resultado del agotamiento del efecto rebote vivido tras la pandemia. Así lo consideró la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en su más reciente anuario estadístico.
La Cepal refiere que a medida que se normalizaron las actividades en 2022, los Gobiernos de la región optaron por limitar su gasto fiscal, a la par de que el consumo, la inversión y el comercio doméstico e internacional disminuyeron. Por su parte las tensiones globales siguen siendo determinantes.
Fuente: RT