Después de tres días de bombardeos continuos, Gaza vuelve poco a poco a la normalidad. Luego del alto al fuego, Israel reabrió parcialmente la frontera con Gaza para atender las necesidades humanitarias.
De esta forma, varios camiones con combustible pudieron cruzar la frontera para reactivar la única central eléctrica de Gaza, que llevaba días sin funcionar.
Según el Ministerio de Salud palestino, estos ataques han dejado como resultado 44 palestinos fallecidos, incluidos 15 niños, y 360 heridos.
El movimiento islamista Hamás, informó que los ataques aéreos israelíes destruyeron nueve edificios residenciales y causaron daños en 1.500 viviendas, además de dañar decenas de hectáreas de tierra agrícola.
Fuente: Europa Press